¿Qué es lo que los universitarios preguntarían a Dios? ¿Qué escuchan en las conversaciones con sus compañeros en las aulas y fuera de ellas? ¿En dónde buscan respuestas? Entrevistamos a tres estudiantes quienes nos despiertan la curiosidad sobre sus interrogantes. Seguimos descubriendo nuestras Preguntas Honestas a Dios.
Isaac Peralta
Isaac Peralta, quiteño, estudiante de la UCE, estoy en séptimo semestre de la carrera de psicopedagogía. Actualmente sirvo como coordinador de mi GU.
Desde tu vivencia como estudiante universitario, ¿cuáles son las preguntas honestas que tu como universitario tienes a Dios?
Aunque las preguntas que he tenido hacia a Dios pueden ser algo insignificantes, comparadas con las que tenía Job, sé que a Dios le importa las que tengo. Una de las preguntas que durante mucho tiempo le hice a Dios, tiene que ver con la incertidumbre de no encontrar un camino claro en mi formación profesional: ¿Será que lo que estoy estudiando es lo que Dios quiere que haga? Por mucho tiempo, al no tener una respuesta de parte de Dios, ha causado grandes niveles de desmotivación en mi vida, tanto a nivel académico como a nivel espiritual, al creer que no estoy en el camino que a lo mejor Dios quiere que este.
¿Cuáles son los cuestionamientos que hacen tus compañeros a Dios?
Algunas de las preguntas de mis compañeros son parecidas a las mías: ¿Por qué en medio de la incertidumbre que sentía en medio de la carrera, no encontré una respuesta de tu parte? ¿Por qué te tardas en responder? ¿Por qué no me das una pista para saber que tengo que hacer con mi vida? Otras preguntas tienen que ver con preguntarle a Dios acerca del ¿por qué nos creó? ¿cuál es el propósito en ello?
Finalmente están las preguntas en relación a la vida personal, laboral y académica; en las cuales, al verse afectada alguna de estas áreas, genera en un desequilibrio personal. Esto incrementa aún más en quienes no saben cómo manejar estos desajustes, y surgen preguntas como: ¿Estás interesado en lo que yo hago con mi carrera o con mi vida? ¿por qué me cuesta tanto aprender o ser el mejor? ¿Por qué me dejas sufrir ansiedad? ¿Por qué, aunque quiero dar lo mejor de mí, no puedo hacerlo? ¿Qué debo hacer? ¿Sigues conmigo?
¿Tus compañeros y tu buscan respuestas a las preguntas? Si es así, ¿dónde buscan?
Observo tres formas distintas en las que mis compañeros intentan dar respuesta a sus preguntas. La primera, es a través de la oración y la fe que han puesto en Jesús, al confiar en él toda su vida. La segunda, es con las personas de su entorno que, a consideración de ellos, son en quienes pueden encontrar una guía. La tercera, es ignorar las preguntas que tienen, pues consideran que si hacen eso, probablemente con el tiempo irán encontrando la respuesta, y la preocupación desaparecerá.
Ana Paula Acurio
Soy Ana Paula Acurio Gutierrez, soy de la ciudad de Cuenca, y tengo 19 años. Estoy cursando mis estudios en la Universidad de Cuenca y actualmente estoy en el segundo semestre de la carrera de Orientación Familiar. Hace 6 años conocí a Cristo y decidí seguirlo.
Desde mi vivencia como universitaria una de las preguntas honestas a Dios ha sido: ¿Cómo puedo expresar mi opinión libremente y sin temor al rechazo? Ante situaciones en las cuales, dentro de los espacios universitarios, el orden establecido por Dios es considerado: “malo”, “extremista” y “religioso”. Cuando intento exponer mi perspectiva, algunos compañeros tienden a atacar y no demuestran respeto.
Los cuestionamientos que hacen mis compañeros giran en torno a temáticas que presentan una marcada división de opiniones: Si Dios existe ¿Por qué hay maldad en el mundo?, ¿Crees que Dios estaría a favor de la maternidad forzada y de que un niño naciera para ser rechazado por sus padres y sufrir?
En mi área de estudios algunas preguntas son: ¿cómo se define una familia? ¿Cada persona decide definir su identidad su género? ¿Qué le da el valor al ser humano?
En la mayoría de las situaciones el ser humano, no busca dar respuesta a esta clase de interrogantes, al menos no en una fuente confidencial, segura y diferente. Al contrario, se observa cómo los contrargumentos resultan dejar aún más preguntas que proponer respuestas.
Marilín García
Mi nombre es Marilin García, soy estudiante de Ingeniería Civil de séptimo semestre en la Universidad Nacional de Chimborazo. Sirvo como coordinadora del GU en la UNACH de Riobamba.
Durante mi vivencia como universitaria han aparecido algunas preguntas que directamente quisiera que Dios responda: ¿La carrera que escogí honrará a Dios? ¿Fue la voluntad de Dios para mi vida estudiar esta carrera? ¿Estoy utilizando al máximo los dones que me fueron otorgados?
En mi entorno universitario, entre compañeros de clases, pienso que la mayoría si cree en la existencia de un ser supremo, pero muchas veces lo ubican en un segundo plano y como un tema tabú que prefieren no tocar muy profundo. Sino que en su mayoría buscan superarse más académicamente, profesionalmente y no tanto espiritualmente. Esto se intensifica debido a que mi carrera se inclina a las ciencias duras que en la mayoría de los casos no mencionan la existencia de Dios. Otros cuestionamientos se referirían a temas como: soledad, problemas familiares y depresión.
Te animamos a compartir más preguntas honestas tuyas y tus compañeros. Comparte este blog y ¡cuéntanos qué piensas!